La Cámara de Diputados le asestó un golpe directo al Gobierno al rechazar este miércoles los vetos de Javier Milei a dos leyes clave: la de Emergencia Pediátrica y la de Financiamiento Universitario. La votación terminó con 181 votos a favor, 60 en contra y 1 abstención (en el caso de la Emergencia Pedriátrica) y 174 votos a favor, 67 en contra y 2 abstenciones (en el caso del Financiamiento Universitario), dejando sin efecto la decisión presidencial y obligando al Senado a pronunciarse.

Ambas leyes habían sido aprobadas en agosto y vetadas el 10 de septiembre. La Emergencia Pediátrica destina un fondo especial de $80.000 millones para hospitales y centros de salud, con prioridad para el Garrahan, ante el aumento de la demanda y el deterioro del sistema. Por su parte, la ley de Financiamiento Universitario libera $150.000 millones en partidas extraordinarias para garantizar el funcionamiento de las universidades nacionales y sostener programas de investigación.

Mientras se desarrollaba la sesión, más de 50 mil personas —entre trabajadores de la salud, docentes, estudiantes y gremios— se movilizaron frente al Congreso en la tercera Marcha Federal, con consignas contra el ajuste y el desfinanciamiento.

El revés parlamentario se suma a una seguidilla de problemas para el oficialismo: denuncias de corrupción en áreas clave, la derrota del 7 de septiembre en la provincia de Buenos Aires y una recesión que acumula 9 meses consecutivos de caída de la actividad. La Libertad Avanza, junto con el PRO, intentó hasta último momento negociar con gobernadores aliados, pero no alcanzó el tercio de votos necesarios para sostener los vetos.